En un giro inesperado en la batalla legal entre Carliz de la Cruz y el equipo de Bad Bunny, los abogados de la exnovia del cantante han decidido no apelar una reciente sentencia que permite al manejador de Bad Bunny, Noah Assad, presentar una segunda moción de desestimación. Esta decisión marca un punto de inflexión en un caso que ha generado gran atención mediática desde que se presentó la demanda en marzo de 2023.
De la Cruz había solicitado $40 millones en daños, alegando que Bad Bunny y su equipo habían violado sus derechos de imagen y autor al utilizar su voz sin autorización en dos de sus canciones, incluyendo la frase “Bad Bunny Baby”. Sin embargo, a pesar de esta acusación, los tribunales han determinado que Assad tiene derecho a presentar una nueva moción para desestimar la demanda.
Aunque los abogados de De la Cruz han expresado su desacuerdo con esta decisión, han optado por no prolongar el proceso legal y han decidido responder a las mociones pendientes antes del 27 de septiembre. Con esta decisión, se abre la posibilidad de que el caso sea desestimado por completo, dejando a De la Cruz sin la oportunidad de seguir adelante con su demanda.